Orígenes de la prensaLa escritura se inventa en Mesopotamia aunque, en una primera fase, es ideográfica. Los primeros documentos escritos que se conservan se atribuyen a los sumerios y son anteriores al 3000 a.C. y, aunque se conoce escritura protoalfabética en torno a los años 1000 o 1300 a.C., habrá que esperar al 800 a.C. para que los griegos separen las vocales de las consonantes y establezcan las bases del alfabeto que utilizas hoy.
Con el alfabeto el hombre aprende a plasmar su creatividad por escrito y se empiezan a escribir los primeros grandes relatos de la historia, muchos de ellos considerados como los antecedentes del reporterismo actual (
La Iliada, Homero, siglo IX a. C.) Con los grandes relatos se produce entre los griegos el auge del libro copiado (siglo V a. C.), que era un
papiro enrollado. Ptolomeo, que gobernó Egipto, con la ayuda de los grandes intelectuales helénicos, logró reunir la que se dice "la mayor biblioteca del mundo", que fue la gran biblioteca de Alejandría.
Desde el siglo III a. C. en Roma comienzan a imitarse las obras griegas. El tráfico de libros y escritos pasa a obtener tal desarrollo que es en esta época cuando surgen los primeros libreros, se hacen lecturas públicas y se anuncian publicaciones en los pórticos del Foro. En la época de Julio Cesar existían las llamadas
Crónica Oficial que son derivaciones del
Calendario y las Actas diurna, populi romani, donde participaron Cicerón, Plinio, Tácito, etc., y que recogían el día a día de la Urbe: si había un acusado famoso, las defunciones y los nacimientos, las listas de procesados, y sobre todo el relato de los éxitos bélicos. Además existían los
enterados que eran noticias recitadas a cambio de dinero, una forma de divulgación muy aprovechada para la implantación del cristianismo por todo el imperio romano. Posteriormente, las invasiones bárbaras romperán esta estructura de comunicación y la harán cambiar de manos con la invasión de Egipto por los árabes en el 639 d. C.
El uso del papiro y del
pergamino pasa a ser casi un monopolio del mundo árabe, de tal forma que el sistema comunicacional de Occidente tuvo que vincularse a la jerarquía cristiana. A la misma hora, domingos y días festivos, la totalidad de la población de Europa celebraba el mismo ritual, el de la misa, que se utilizaba para transmitir todo tipo de mensajes. Cualquier documento escrito quedó reservado al ámbito de los monasterios.
Llegada la Edad Media empieza a florecer el comercio, con él los juglares y los trovadores, y con las rutas de la seda se introduce el papel en Europa a través de España, más o menos en el siglo X (en el Monasterio de Silos se conserva el
Misal Toledano que es de papel) Durante los siguientes siglos seguirán proliferando los documentos escritos gracias a las universidades, y en el S. XIV la transmisión de noticias dio otro gran salto, también de la mano de España, con el dominio de las rutas marítimas. El descubrimiento de América (1492) generó una gran necesidad de conocimiento: se recuperó la tradición china de imprimir libros con tablas de madera entintadas, se revitalizó el sistema de correo que habían creado los romanos, con lo que se impone el género epistolar no sólo para comunicar, sino también para la divulgación científica, y comenzaron a circular las
hojas volantes. En este ambiente surgió la figura del copista, un oficio determinante para la historia de la prensa.
Ya en el Renacimiento se manejaban cuatro tipos de documentos:
las crónicas, narraciones históricas propagandísticas e institucionales muy parecidas a las
Actas diurna; las
cartas-diario, que realizaban las casas comerciales para comunicar cualquier asunto relacionado con los negocios y terminaron dando información política y militar; los
almanaques, muy populares, incluían predicciones astrales, avances del tiempo, consejos... fueron un gran vehículo culturizador de las amplias capas analfabetas de la población; los
avvisi, que surgieron en los focos comerciales italianos y que se extendieron por toda Europa con diferentes nombres. Eran unos folios plegados con noticias relacionadas con el tráfico de mercancías, precios y sucesos curiosos. Salían una vez por semana y su precio era una moneda conocida como
gazzetta, que al final terminó dándole el nombre. Las gacetas son el mejor ejemplo del "noticierismo manuscrito". Se vendían en las plazas y a través del correo regular. Llegó un momento en el que los copistas no eran capaces de satisfacer la demanda y como el papel ya se había instalado en Europa se investigaba continuamente en
sistemas de impresión rápidos. Johann Gensfleich zum Gutenberg fue uno de esos investigadores. Alrededor de 1434 residía en Estrasburgo y trabajaba en su invento perfeccionándolo hasta terminar, en 1456, una
Biblia de cuarenta y dos líneas (también llamada la
Biblia de Gutenberg) con una
imprenta de tipos móviles tan perfeccionada que no se modificó hasta el siglo XVIII.
Prensa en Iberoámerica Cuando los españoles llegaron a tierras americanas encontraron sistemas de comunicación muy importantes en aquellas civilizaciones precolombinas: la inca de Perú, la maya de Centroamérica y la azteca de México. Los conquistadores españoles sentían la necesidad de libros, sobre todo los misioneros para el adoctrinamiento, pero en las colonias, el control de la imprenta fue muy rígido y la primera que llegó a México en 1536, enviada desde Sevilla, la solicitó el obispo de México, Juan de Zumárraga.
México fue el pionero en la publicación de gacetas, hojas volantes que manifestaron el quehacer periodístico y establecieron una periodicidad fija hasta que en 1722 surge la
Gaceta de México y
Noticias de Nueva España, primera en aparecer en las colonias españolas. En Guatemala apareció la segunda en 1729 la
Gaceta de Guatemala. Una tercera publicación nació en Perú, la
Gaceta de Lima, en 1743. La imprenta llegó a la Habana en 1735 y en 1764 surgió la
Gaceta de La Habana. Las gacetas literarias y los mercurios fueron el vehículo ideal del pensamiento ilustrado para llegar a la nueva sociedad americana que dio origen al periodismo criollo y emancipador:
Gaceta Literaria de México (1788);
El Telégrafo Mercantil, Rural, Político, Económico e Historiográfico del Río de la Plata, de 1801, primer diario argentino; la
Gazzeta de Río de Janeiro, primer periódico brasileño en 1808; la
Gaceta de Caracas (1812) o
La Aurora, primer diario de Chile, en 1812.
El siglo XIX se caracteriza por un periodismo antinapoleónico y revolucionario. Las imprentas lanzaron proclamas patrióticas de adhesión a la monarquía española y contra el invasor francés. Pero es un momento de manifestar ideas de independencia y de hacer un periodismo político, anti absolutista, que culminó con el Trienio Liberal. A lo largo de este siglo, las publicaciones de diferente signo político se centraban en un objetivo principal: la emancipación de la metrópoli española. Para esta labor nacen diarios de gran calidad, que se ocupaban del seguimiento serio y exhaustivo de la noticia de actualidad incorporando profundos análisis de sus consecuencias. Este camino que había iniciado
The Times en Inglaterra o
El Imparcial en España, en Iberoamérica es seguido por
La Nación de Buenos Aires o
El Siglo de Montevideo. Cuando en 1870 aparece
La Prensa, el más importante diario argentino, su lema fue: "Libertad, Progreso y Civilización". En Perú a lo largo de "etapa caudillista", nació el periódico
El Comercio (1839), uno de los grandes supervivientes que aún quedan en el continente americano.
La consolidación de las nuevas naciones con el triunfo del liberalismo facilita el desarrollo del periodismo de masas. La aparición del periodismo como empresa en las últimas décadas del XIX llevará a la prensa iberoamericana, políticamente independiente y progubernamental, a centrarse en fines comerciales. En 1896 apareció
El Imparcial en México, que inauguró la etapa del periodismo industrializado, con un precio muy bajo, que introdujo el amarillismo informativo, y se dedicó a la defensa de las clases poderosas. En Chile, en 1827, se empezó a editar en Valparaíso
El Mercurio, modelo periodístico que aún hoy tiene una gran influencia en la opinión pública e instrumento imprescindible para conocer la historia chilena. En la etapa de inicios del XX su modelo a imitar será el
New York Herald. Después de la II Guerra Mundial se han dado todo tipo de regímenes políticos, desde democracias a dictaduras, militares y marxistas. La mayor parte de los periódicos son de propiedad privada y forman parte, en general, de importantes
grupos de comunicación, que a su vez suelen estar muy relacionados con los estados. La prensa se concentra, principalmente, en áreas urbanas, y el analfabetismo, la dispersión, la marginación de grupos, la miseria y la falta de comunicaciones apropiadas han impedido que la prensa llegue a toda la población, por lo que el medio por excelencia de socialización, de adoctrinamiento, medio informativo único y no superado, en la mayoría de los países iberoamericanos, ha sido y es
la radio.Algunos ejemplos de periódicos de Latinoamérica son:
www.clarin.com/ Argentina
http://jbonline.terra.com.br/ Brasil
http://diario.elmercurio.com/2009/11/18/_portada/index.htm Chile
Otros periódicos importantes en la actualidad como por ejemplo:
http://www.nytimes.com/http://www.elmundo.es/http://www.lemonde.fr/Periódicos de Galicia :
http://www.lavozdegalicia.eshttp://www.elcorreogallego.es/Para más información sobre periódicos online visitar la página:
http://kiosko.net/